… en pleno fin de semana

Lo estatal transcurría hoy en grandes temas generadores de variadas expectativas: la reunión del gobierno con el empresariado selecto, la reflexión catalana (es un decir), el nuevo proyecto sin violencia de la izquierda abertzale. Y como no, las especulaciones sobre el próximo gran acontecimiento.

Mientras escuchaba vía streaming Diálogos 01 y trataba de encontrar el hilo conductor hacia la esencia de estas dos semanas tan exteriores y tan sociales, se me vino a la cabeza lo de los problemas perversos.

En los entornos, que no contextos, que compartí estos días, una parte insistía en la primera fórmula y la otra parte apuntaba hacia la segunda. Igual por eso esta especie de cortocircuito en la que veo todo con bastante claridad pero como lo pienso al mismo tiempo, no arranco. Igual he transversalizado demasiado entre el presente que manda y el futuro que necesitamos. ¡Ay, esas minorías poderosas que no quieren ver lo que ya está ahí!

La reunión con los 37 podría tener interés si no fuera por las zanahorias, las del uno y las de los otros. Porque es cierto que una sociedad avanzada invierte en servicios públicos y en bienestar social, pero los recursos para invertir en los servicios públicos tienen que venir de la competitividad del sector privado.

Esta reunión tendría que haber sido hace años, como mínimo dos. Y ni siquiera creo que estuviera en ningún discurso eso de que las empresas no nacen en garajes, sino que nacen en otras empresas. A los unos no les afecta y al otro el mito discursivo le queda bien, a pesar de lo claro que lo explica Alfóns Cornella:

Entenderlo tiene ahora una importancia crucial. Porque en estos momentos en los que tenemos imaginación con gran potencial económico, pero inmersa en un entorno poco dispuesto a invertir en lo nuevo, las empresas sólidas ya existentes podrían contribuir al desarrollo de nueva riqueza albergando a empresas emergentes que les aportaran la visión que a menudo les falta. Sería la visión multiplicada por la solidez, y a la inversa.

Los grandes temas de hoy me parecen demasiados kilómetros para esta sensación de seguir en los mismos sitios. Será por eso este cansancio. Mañana es domingo, menos mal.

Publicación original: enPalabras

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