Relaciones de poder

La-mujer-en-el-audiovisualComo cada año la Academia Galega do Audiovisual nos propone un tema central sobre el que realizar nuestras aportaciones para el anuario. Y a mi me gusta colaborar sin embargo esta vez… la ambigüedad del tema propuesto me resulta tan abrumadora como desconcertante: la situación de la mujer en el audiovisual.

Por un lado estoy convencida de que no existe el tema “mujer” y por otro creo que, tras la palabra “audiovisual”, siguen asomando poderosas nostalgias de un cine que ya nunca más será. Necesito encontrar un enfoque para acotar y unir los conceptos y para ello nada mejor que desgranarlos individualmente y ubicarlos en el contexto de la institución que lo propone así que me voy a su razón de ser:

La Academia Galega do Audiovisual agrupa a creadores y profesionales del audiovisual gallego (cine, multimedia, publicidad, televisión, vídeo). Los académicos (y las académicas, supongo) ejercen diversos oficios; trabajan en diversos géneros, medios, empresas e instituciones, piensan su labor desde distintos postulados estéticos, industriales, ideológicos… La Academia es el espacio común para un colectivo diverso con algo que los une: formar parte del audiovisual gallego.

La misión de la Academia es la de fomentar el desarrollo de las artes y de las ciencias relacionadas directa o indirectamente con el audiovisual en Galicia, promoviendo y defendiendo la imagen pública del conjunto de los profesionales del sector.

Con tal diversidad de oficios, ideologías, formas jurídicas, etc., pensé que, para abordar la cuestión de género en el sector, podría solicitar algunos datos desagregados de la Academia, pero a la vista de las discordancias en el uso del masculino genérico, supongo que no los habrá. Me acordé entonces de la asociación CIMA, que agrupa a más de 200 mujeres profesionales cineastas y de medios audiovisuales y pensé que era un buen momento para navegar por su Web. Sin embargo, leer el propósito y el por qué de su existencia ha añadido algunas dudas más al desconcierto inicial porque, ¿de verdad funciona el asociacionismo? ¿es la herramienta adecuada para abordar como objetivo el síntoma de un problema mucho más amplio y universal?

Objetivo de CIMA: fomentar una presencia equitativa de la mujer en el medio audiovisual. Así contribuimos a crear una sociedad más igualitaria y diversa.

Tenemos por un lado el complejo sector audiovisual que no da encontrado su camino y, por otro, los sesgos y desigualdades entre hombres y mujeres en todas las profesiones, bien sea por falta de presencia y visibilidad o por diferencias salariales. Es decir, el primer eslabón que encuentro entre mujer y audiovisual se refiere al dinero y al poder.

Otra cuestión interesante se refiere al «qué», es decir, los contenidos. Y aquí hay que barajar al menos dos aspectos: las historias o realidades que se quieren contar y el talento para hacerlo. Lo segundo es difícil de medir puesto que el arte es subjetivo y está tan sometido a las modas como a al marketing (de nuevo dinero y poder que mediatizan audiencias). Respecto a los contenidos hay literatura y «estudios» con los que no sé si puedo estar totalmente de acuerdo: que si los matices, que si la perspectiva de la historia, que si el tratamiento de los personajes…

Lo pienso un poco y creo que no quiero reducirlo a esas diferencias porque, una vez más, me acojo a lo de que «un caso negativo nada prueba, uno positivo sí». Sin rebuscar demasiado encuentro ejemplos de excelencia en sutileza de matices y buen tratamiento de los personajes tanto en directoras como en directores, como Héctor, de Gracia Querejeta, o Solas, de Benito Zambrano. Por no hablar de muchas de Jonh Sayles.

Es decir, no hay base suficiente para diferencias cualitativas (hay público para todo) pero sí cuantitativas porque los círculos de poder son restrictivos y autocomplacientes. Y como suelo decir, aunque suene repetitivo, ahí no hemos estado. Al igual que en otros sectores, en el audiovisual esos círculos apuntan a la distribución, que de tanto buscar la especulación como objetivo, se ve aquejada de los males de su propio éxito.

Mujer y con un pie en el audiovisual, se supone que el tema propuesto debería gustarme, pero no. Me dan alergia las grandes cuestiones y sus intelectualismos. Me puse a escribir buscando palabras para una opinión pero no lo he conseguido. Igual el enfoque para mi artículo es que resulta mucho más interesante hablar de hechos y relaciones de poder, sobre todo ahora que se ensalza constantemente el poder de las red-laciones.

El dato

alice-guy-blacheA los 23 años, Alice Guy-Blanche (1873-1968) imaginó y realizó la primera película de argumento en la historia del cine. Trabajaba para un comerciante francés que distribuía proyectores de cine y se dio cuenta de que el futuro de ese nuevo medio de comunicación no estaba en las tomas documentales sino en el argumento. Su primera película fue Fée aux choux a la que siguieron otras. Fue a raíz del éxito que otros productores empezaron a realizar nuevas películas argumentales.

alice-guy_be-natural

 Publicación original: enPalabras

 

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *