Cuando un titular aborda un tema que ya no está en la cresta de la ola, suele llamar mi atención. A veces me equivoco, aunque hay paradas obligatorias, pero si alguien comete la osadía de escribir sobre algo que fue noticia hace una semana, es que seguramente tiene algo que aportar.
La inmediatez está sobrevalorada, incluso en la red. Por eso las opiniones suelen dividirse en dos grupos, a favor y en contra, con la única salvedad del grado de corrección y estilismo. O sea, la forma, que no el fondo.
Por eso, a la espera de la segunda entrega promocional de la huelga, la lectura de UGT y sus vídeos ha sido, además de instructiva y enriquecedora, un regalo para la inteligencia: reflexión elaborada, conocimiento y perspectiva diferenciada. O lo que es lo mismo, un contenido singular y plural.
Pero he de reconocer que, viniendo de quien venía, era una apuesta segura.
Publicación original: enPalabras