Y tu Web que tal?
El hecho me hizo sonreír, como no, pero a continuación me sumergí en la gama de grises que me impide tener opinión . Mi primera consulta reflejaba las mismas dudas, me fastidió porque quería respuestas, pero lo entiendo: hay mucho que reflexionar.
De los posicionamientos claros en contra me convencen más los que reclaman el reto de madurez que los que se preocupan por la posible explotación de la imagen de victimismo de las SGAE. Pero en todos encuentro argumentación contundente. Seguía sin tener opinión, así que me enfrasqué en otros análisis sobre las reacciones encontradas entre los defensores de la red sobre la acción de Anonymus.
Tras la lectura a fondo de todos y cada uno de sus enlaces, me fui dando cuenta de que tiendo a identificarme con quienes manifiestan y analizan sus dudas, independientemente de la conclusión. Es decir, que la necesidad de tener opinión había dado paso a la de entender por dónde camina el futuro.
Hace 10 días hubo una huelga ¿general?. El contraste entre UGT y sus vídeos y el ataque de Anonymous, es como intentar modernizar el siglo XIX cuando estamos en el XXI. Como dijo Enrique Dans, la aprobación e imposición de leyes no va a parar lo que es evidente: Es, simplemente, la reacción imparable de la red. Y vendrán más.
Siguiendo la recomendación de Gonzalo Martín, me he venido a reflexionar a mi blog, pero tampoco es que avance mucho. Veo más problema en la posible polarización y parálisis del debate entre quienes defienden la red que en la reacción gubernamental. Intuyo conexiones que se me escapan.
Hoy Albert García Pujadas decía: No estamos en la operación triunfo, estamos en la operación supervivencia. Igual es que estamos usando los equipos de salvamento de forma equivocada.
Seguiré atenta a opiniones y acontecimientos. Esto no es un titular, la cosa va para largo.
Publicación original: enPalabras