Dicen que los sitios son de las personas que lo habitan pero algunos tienen una magia especial. En una de esas etapas de presente confuso que se cuelan en los proyectos, encontramos el refugio que nos ayudó a mirar más allá del universo Calcetin(e)s. Pero es que además del encanto que derrocha es especial porque las imperfecciones forman parte de la historia y permite que te sientas diferente según donde decidas sentarte.
En el Bata de Guata conviven diferentes generaciones y personalidades con un concepto de utilidad basado en el valor de los recuerdos y las vivencias. Te haceparar para reflexionar y activar la imaginación desde la observación de cada elemento y cada persona que lo ocupa y, mientras tanto, ves como la vida sigue su curso fuera de sus paredes.
Casualidad o destino, se ha convertido en un no punto en común de nuestra red cuyo nodo es Eva (Alba en la ficción). Desde hace un tiempo su familia regenta este lugar que nos tiene enamorados. ¿Cómo vamos a resistirnos a su propuesta de reunirnos allí todo el equipo?