Hiper conexión y no-lugares
¡Qué complicado se está volviendo el presente! Empeñados en la trascendencia histórica que algún día tendrán los acontecimientos del momento, la obsesión por el “ya” y el “ahora” resultan abrumadoras.
Paradoja de la era de la información en la que el exceso de datos y la obsesiva necesidad de opinar sobre todo (sea a favor o en contra) nos convierte en monotemáticos. A veces hasta se hace difícil seguir caminos al margen.
No me suelen gustar las listas. Las de «cosas por hacer» porque nunca cuadran con el tiempo disponible y “las de personas” porque, en muchos casos, desprenden un sospechoso tufo a sectarismo y a gueto. Soy más mapas para visualizar, y de hojas de ruta para caminar. Sin embargo me sentí halagada cuando arati me incluyó entre los Seres fantásticos y raros que no estábamos «sufriendo» con el último (nunca mejor dicho) partido de España en el mundial.
Hoy Mara me decía que «¡cuando piensas con alma te oyen!”, y va a ser que ambas tienen razón: en estos tiempos de híper conexión hay sitio para refrescantes no-lugares.
Igual es cuestión de aplicar la estupenda frase que capturé en este momento Mad Men: «Si no te gusta lo que dicen, cambia de conversación».
Publicación original: enPalabras
