Jugando a ser real

Banksy-Ghetto-LifeTanto en su origen militar como en su exponencial crecimiento e implantación en todos los ámbitos, el éxito de los simuladores y juegos de estrategia radica en su capacidad de aproximación a la realidad y en su potencia como acelerador de los procesos de aprendizaje.

Pero las bondades de la herramienta no garantizan lo apropiado de los objetivos.

El titular decía: Crea tu propia ONG a través del videojuego Karma Tycoon. ¿Tu propia ONG? ¿Será la versión moderna del «ponga un master en su vida?

A sabiendas de que los titulares los carga el diablo me fui al contenido de la noticia esperando que al menos estuviera enfocado la profesionalización en la gestión de este tipo de organizaciones, pero no, la ONG es la disculpa para el auténtico objetivo del juego: surfear por el sistema para conseguir dinero.

El juego comienza con la gestión de un centro en Ohio (que puede ser refugio de desamparados, refugio de animales, centro de artes escénicas o centro de la tercera edad), para lo cual el jugador dispone de 35.000 dólares. La gestión es igual de difícil que en la vida real, ya que el jugador tendrá que pagar 5.500 dólares al mes en honorarios, de los que 2.700 son para nóminas, 1.400 para el alquiler, 800 para los servicios públicos y 650 para suministros, además de los impuestos mensuales y los cargos bancarios.

En la sección de subvenciones hay varios fondos a los que recurrir, cada uno de los cuales requiere de un cierto nivel de karma, un cantidad específica de dinero y una mínima cantidad de instalaciones. Las subvenciones son útiles porque el jugador no tiene que pagarlas, a diferencia de los préstamos.

Durante el juego, recibirá donaciones de la comunidad. Cuanto mayor sea la calificación del karma, más fácil será recibir donaciones y que se concedan las subvenciones.

Simular vs. prototipar

Sin embargo, por seguir el ejemplo del videojuego, en la vida real nadie regala miles de dólares para empezar, los desamparados tienen rostro y las nóminas son personas. Pero parece que la conciencia o el propósito no importan, los valores no son un buen incentivo, el dinero sí.

¿Cómo encajar esta tendencia a la ficción de la (mala) vida con la cultura del prototipado? Porque, como decía Juan Freire, «en un entorno complejo es imposible pensar sin hacer, vivimos y en una cultura del prototipado, de la experimentación continua en la que hacer y pensar van de la mano».

La fotografía del inicio del post correspendo a una obra de Banksy que ilustra bien este juego de escaparates y de ONG-ización (in)social

Publicación original: enPalabras

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4 Comments

  1. Hola. Soy Alejandro Domínguez, director del portal omniumgames.com

    Felicitarla en primer lugar por el post, en el que analiza en profundidad nuestra entrada sobre este videojuego, desde una perspectiva crítica basada en una palpable experiencia y sensibilidad hacia los problemas sociales.

    Decirle que, como medio de comunicación, servimos de vehículo transmisor para dar a conocer serious games que hayan sido desarrollados, es decir, videouegos cuya finalidad va más allá del entretenimiento.

    No es nuestra función, por lo tanto, el defender la mejor o peor pericia que hayan tenido sus desarrolladores en lograr el objetivo perseguido, algo que los lectores vinculados a su ámbito competencial podréis hacer mejor que nosotros. En cualquier caso, y sin incurrir en esa defensa, como le digo, sí entendimos al incluirlo en nuestro portal que se trataba de un videojuego en el que el jugador, al menos, entraba en contacto con una realidad ajena, como es la difícil gestión administrativa que se esconde detrás de un proyecto de ayuda social o humanitaria (sin saber si el resultado es el más deseable), motivo por el que titulamos el post «Crea tu propia ONG», ya que el proceso de creación de una organización de estas características exige de una serie de acciones de gestión de recursos.

    No entramos a valorar, para nada, si la forma en la que dichos recursos han sido utilizados en el juego es o no la más apropiada, algo que, como le decía, son ustedes los sectores vinculados a cada ámbito competencial los que mejor lo sabréis calibrar.

    Aplaudo también su introducción del debate acerca de la simulación y el prototipado, un debate que está actualmente latente en el mundo del serious game, ya que este género está llamado a ir mucho más allá de la mera simulación, para convertirse en un recreador de experiencias a través de la fuerza que poseen los videojuegos.

    Omniumgames, además de un vehículo transmisor, es un portal evangelizador de esta corriente de los videouegos serios, de la que somos firmes enamorados, además de estar embarcados en el desarrollo de varios. Por ello, sin entrar a valorar ni a defender el título al que hacía referencia este post, sí la invito a que conozca otros varios casos de videojuegos que hacen alusión al mundo de la ayuda social y humanitaria:

    http://omniumgames.com/peace-maker-un-juego-de-estrategia-para-lograr-la-paz-en-oriente-medio/

    http://omniumgames.com/zaytoun-vive-desde-dentro-el-conflicto-de-siria/

    http://omniumgames.com/refugee-un-serious-game-que-te-pone-en-la-piel-de-millones-de-refugiados/

    http://omniumgames.com/ciudadanos-del-tercer-mundo-reconstruyen-sus-hogares-con-minecraft/

    http://omniumgames.com/aprende-sobrevivir-una-inundacion-con-sai-fah-fighter-flood/

    http://omniumgames.com/sumergete-en-la-realidad-de-la-ayuda-humanitaria-con-food-force/

    A todo ello, añadiría que otra forma de aproximarse con exactitud al alcance real de estos videojuegos está en jugarlos (la mayoría de ellos son gratuitos en portales web) y comprobar las bondades que puedan o no tener en su proceso inmersivo.

    Muchas gracias por la atención y la reitero las felicitaciones por su post. Necesitamos lectores críticos.

    1. Hola Alejandro. Ante gracias por tu comentario, por lo que dices y cómo lo dices ya que me ayuda a completar mi propia reflexión reflexión.

      Completamente de acuerdo en que, como medio de comunicación especializado, no se debe ejercitar la censura y que vuestra función es dar a conocer, no la de entrar en valoraciones a fondo. Yo tampoco puedo, ni debo, entrar a valorar el juego como herramienta, no soy especialista en ello, lo que ha provocado mis dudas es el enfoque. Efectivamente mi grado de sensibilización y conocimiento en el ámbito de las organizaciones sin ánimo de lucro es importante y me parece preocupante el grado de banalización con el que se tratan los temas de ayuda humanitaria.

      En realidad el planteamiento del videojuego es un síntoma, no una causa, y la forma en que se están abordando los síntomas parece hacernos olvidar que la finalidad última de toda ONG debería ser “que no fueran necesarias”. Es decir, deberían constituirse con un doble objetivo en el sentido de que al tiempo que sacan a la luz el problema que las motiva, deben trabajar para que gobiernos y ciudadanía asuman que hay una situación por resolver.

      Precisamente porque conozco bien el entorno de las organizaciones no lucrativas (sociales, empresariales, culturales…) sé que una vez constituidas se revisten de un corporativismo que tiende a que alejen de la realidad. La fórmula de financiación a través de subvenciones es absolutamente perversa puesto conlleva un peligroso grado de colaboración con los financiadores que tienden a poner en peligro la causa que se defiende. Lo estamos viendo constantemente y en todos los niveles, sean de ámbito local o internacional.

      Creo que de mi reflexión también se desprende que no estoy en contra de la herramienta. Estuve a punto de incluir al final del post este vídeo que habla precisamente de los serious games y del que me gustó esta sencilla explicación del criterio que se utiliza:

      Un juego que ha sido creado desde el principio con un propósito serio, es decir, un objetivo pedagógico profesional. Es útil en tres situaciones:
      1. Cuando un mensaje es demasiado complicado
      2. Cuando es demasiado aburrido
      3. Cuando es tan simple que no queremos perder tiempo

      Te agradezco los enlaces, los iré revisando con la calma que merece el tema ya que, coincido contigo, su potencial como herramienta es muy importante.

      Por último, es una pena que no hayas puesto tu comentario en la entrada original ya que toda reflexión tiene múltiples matices que es necesario escuchar y comprender para poder avanzar. Procuraré seguir vuestro trabajo.

      De nuevo muchas gracias Alejandro. Un saludo
      Isabel

    2. Por cierto, con respecto a la sensibilización hacia la colaboración y el compromiso social, nosotros lo utilizamos desde el cine como concepto: como la película Máscaras, que te invito a ver, y que posteriormente ha dado lugar a una asociaron que lleva su nombre pero que pretendemos desarrollar con calma, actuando sobre objetivos concretos y desarrollando fórmulas de financiación diferentes.

      Sobre la película, te destaco dos referencias, la de Filmin y la de la Bienal de Arte Contemporáneo de la Fundación ONCE, donde se ha proyectado este año.

  2. Gracias una vez más, Isabel.
    Seguiremos de cerca todo lo que hacéis.

    Respecto del comentario, lo hubiera hecho gustoso, pero nuestros lectores no lo hubieran entendido, ya que habría sido la respuesta a un enlace, y no habría una lógica. Por nuestra parte, encantados de contactar con vosotros.

    Estamos en contacto.

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