Decíamos ayer…
Harris es la voz solista de la Malagasy Gospel (Madagascar). Tiene 18 años y hasta hace cinco vivía en un internado cochambroso para niños ciegos.
Se cree que tiene el síndrome de Williams: no puede controlar sus manos y tampoco puede decir más de tres palabras seguidas. Pero es un superdotado para la música. Oye una canción en cualquier idioma, sea el que sea, y la canta perfectamente.
Comentábamos ayer, al hilo de la educación y la necesidad de cambios, como las supuestas mayorías aparentan, pero arrinconan, todo aquello que se sale de la normalidad aceptada. Hoy me dan esta pequeña reseña de Harris y sólo puedo emocionarme y pensar en la forma de gritar: ¿Lo veis? ¡Está ahí! ¡Sólo tenemos que aprender a mirar… y a escuchar!
Publicación original: enPalabras